miércoles, 18 de mayo de 2011

Sobre la actual huelga de hambre de los peñis presos en la cárcel de Angol


La lucha que sostiene el pueblo mapuche por la recuperación de su territorio ancestral o Wallmapu, se ha ido radicalizando desde hace décadas. El Estado chileno ha contestado de manera altamente represiva y violenta, salvaguardando, como parece obvio, los intereses de los grandes capitalistas y los poderosos del país.

Actualmente cuatro comuneros mapuche, acusados el homicidio frustrado contra el fiscal Mario Elgueta y por lesiones leves a los funcionarios policiales que lo acompañaban, mantienen una huelga de hambre por más de sesenta días con el fin de tener un juicio justo, es decir, sin las normas que impone la Ley antiterrorista. Son principalmente dos las situaciones que reflejan la injusticia existente en el seno de dicha ley y, claramente, los efectos que tiene la misma en los imputados.

Primeramente, el uso de “testigos protegidos” demuestra la arbitrariedad de un proceso corrupto y, esencialmente, injustificado por parte de la justicia chilena. Por lo demás, el veredicto se estructuró sobre la base de sólo uno de los 36 testigos protegidos utilizados en la causa.

Por otro lado, se debe hacer notar la excedida cantidad de años de prisión a los que fueron sentenciados los comuneros. Las sentencias a las que están siendo sometidos son de 20 y 25 años. Cabe recalcar que la pena del carabinero asesino de Matías Catrileo fue la de firmar, en libertad, durante tres años; para la muerte de Alex Lemún (asesinado por un disparo en la cabeza), existe un carabinero identificado, el cual fue reubicado y sigue ejerciendo con impunidad al interior de la institución, ya que aun no ha sido procesado. De esa forma, la lista de injusticia e despotismo suma y sigue.

La situación de salud actual de los peñis de la cárcel de Angol es crítica: Héctor Llaitul (43) ha bajado 20 kilos, presenta decaimiento, calambres en sus extremidades, insomnio y una intensa cefalea; Jonathan Huillical (23), ha perdido 18 kilos y presenta síntomas similares a los de Llaitul, lo mismo ocurre con José Huenuche (34), quién ha perdido 16 kilos, y Ramón Llanquileo (29), este último ha perdido 17 kilos.

Todos estos síntomas adversos se ven agudizados por una situación puntual, cada uno de los peñis que actualmente mantienen esta medida de presión, participaron de la huelga de hambre protagonizada por miembros de la CAM (Coordinadora Arauco – Malleco) en distintas cárceles del sur del país durante el segundo semestre del año pasado.

La lucha por un juicio justo no sólo hace referencia a los peñis, sino que también representa una contienda mayor: Terminar con la criminalización de las luchas sociales. Esta situación se ve reflejada en la aplicación de la Ley Antiterrorista, el alcance de los impactos de esta ley no sólo va a afectar a los comuneros mapuche, sino que también puede llegar a ser perjudicial para cualquier compañero que se desenvuelva en alguna lucha popular como la de la salud, educación o vivienda.

Es por eso que tenemos el deber de apoyar, con todos nuestros medios, las demandas de los comuneros en huelga de hambre y la causa mapuche en general, para también combatir las leyes y procedimientos que utilizan los poderosos contra los movimientos que buscan justicia para los pueblos.


¡! NO A LA LEY ANTITERRORISTA ¡!
¡WEUWAIN PU PEÑI!
ESTE Y TODOS LOS JUEVES… ¡ A MARCHAR POR EL PUEBLO MAPUCHE !
ALAMEDA CON AHUMADA, 19 HRS







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