Somos un conjunto de estudiantes de diferentes Universidades (tradicionales y privadas), Institutos Profesionales , CFT, Colegios y Liceos que nos hemos unido y organizado para desarrollar una propuesta y una práctica político-social dentro del estudiantado y las poblaciones. Colocando nuestros máximos esfuerzos en los distintos espacios organizativos, reivindicativos y de construcción popular, para reunir las fuerzas, la experiencia, la conciencia y las capacidades necesarias para transformar la realidad, que hoy más que nunca golpea duramente a los estudiantes y al pueblo pobre en general.
La educación, resulta ser una de las herramientas más importantes para el completo desarrollo del ser humano, es por ello que esta debe estar al servicio de todo el pueblo, siendo un derecho para todos. No obstante, a través de la historia la educación ha sido instrumentalizada por las clases privilegiadas para enseñarle al pueblo a servir a los poderosos, brindarle a estos últimos la mejor educación posible, y por si fuera poco, permitirles levantar negocios enriquecedores con ello.
Chile es un claro ejemplo, ya que tenemos un sistema educativo (diseñado e impulsado en Dictadura, mantenido y perfeccionado por la Concertación) profundamente desigual, en donde el acceso a la educación está determinado en función de cuánto pueda pagar un usuario para adquirir aquel servicio (convirtiéndose así en una mercancía, y negándose como un derecho), existiendo una educación de excelente calidad para los ricos y una pésima educación para los pobres. Las diferencias se hacen notar desde la educación básica, las que luego se agudizan aún más durante la media. Proceso que con éxito para las clases dominantes, termina antes de acceder a la educación superior. Y en caso de que puedan acceder a algún tipo de educación superior, el estudiante se encuentra con costos de aranceles y matriculas superlativas, las que no pueden ser pagadas por los sectores populares, ni tampoco en varios (por no decir todos) “sectores medios”… el endeudamiento es el camino que por obligación debe tomar la clase popular, dejando completamente de lado el derecho que tienen TODOS de acceder a la educación. Esto representa fehacientemente el carácter mercantil de la educación, donde es el Mercado quién regula el acceso a la educación (de acuerdo las capacidades de consumo), lavándose las manos el Estado y quedando como un simple subsidiador de municipios y privados, contando estos últimos con un jugoso negocio a costa del esfuerzo de las familias chilenas.
Es por esto que entendemos que si buscamos un cambio verdadero a la educación, para que esta esté al servicio de la sociedad en su conjunto, NO BASTA con hacer reformas a las leyes que la sustentan, sino que debemos actuar por transformar las bases educacionales en sí mismas y a la base estructural que sostiene ésta y otras formas de dominación y explotación, es decir, el capitalismo. Entonces, no basta con una Reforma Educacional, o una Reforma Universitaria, sino que lo que necesitamos es una Revolución Educativa, que entregue la educación al conjunto de la sociedad y nos permita conquistarla como un verdadero derecho al servicio de nuestro desarrollo como seres humanos.
Es por esta razón que nos consideramos como sujetos revolucionarios y apostamos a que el pueblo vaya recuperando a través de su lucha y organización lo que el sistema le ha negado (salud, educación, vivienda, justicia, igualdad, libertad, etc.), generando instancias de autogobierno que le permitan tomar el control de sus vidas (lo que históricamente se ha conocido como Poder Popular), sólo así se puede alcanzar la emancipación del pueblo de Chile, y de toda América Latina. Este proceso se lleva adelante tanto a través de la lucha reivindicativa como a través de los distintos espacios organizativos y trabajos de construcción territorial que podamos ir desarrollando desde las bases, siempre con el énfasis en que aquello que hemos definido como derechos, los cuales se deben ejercer y defender por todos los medios existentes.
Convergencia Estudiantil ha surgido para ser un aporte real y concreto en la organización, lucha y construcción de un proyecto que nazca en el seno del estudiantado chileno. Un espacio abierto y democrático para todos los estudiantes, que deseen organizarse y trabajar para cambiar ésta educación, y a la vez construir una sociedad completamente distinta.
Sabemos que en las distintas universidades, institutos y centros de formación técnica existen un sin número de problemáticas y necesidades y, al mismo tiempo, existen una gran cantidad de estudiantes críticos, conscientes y con la firme convicción de querer construir una educación más justa y liberadora. A estos compañeros les dejamos abierta la invitación a acercarse, participar y construir conjuntamente un camino que nos permita recuperar una educación para todos y todas.
La educación, resulta ser una de las herramientas más importantes para el completo desarrollo del ser humano, es por ello que esta debe estar al servicio de todo el pueblo, siendo un derecho para todos. No obstante, a través de la historia la educación ha sido instrumentalizada por las clases privilegiadas para enseñarle al pueblo a servir a los poderosos, brindarle a estos últimos la mejor educación posible, y por si fuera poco, permitirles levantar negocios enriquecedores con ello.
Chile es un claro ejemplo, ya que tenemos un sistema educativo (diseñado e impulsado en Dictadura, mantenido y perfeccionado por la Concertación) profundamente desigual, en donde el acceso a la educación está determinado en función de cuánto pueda pagar un usuario para adquirir aquel servicio (convirtiéndose así en una mercancía, y negándose como un derecho), existiendo una educación de excelente calidad para los ricos y una pésima educación para los pobres. Las diferencias se hacen notar desde la educación básica, las que luego se agudizan aún más durante la media. Proceso que con éxito para las clases dominantes, termina antes de acceder a la educación superior. Y en caso de que puedan acceder a algún tipo de educación superior, el estudiante se encuentra con costos de aranceles y matriculas superlativas, las que no pueden ser pagadas por los sectores populares, ni tampoco en varios (por no decir todos) “sectores medios”… el endeudamiento es el camino que por obligación debe tomar la clase popular, dejando completamente de lado el derecho que tienen TODOS de acceder a la educación. Esto representa fehacientemente el carácter mercantil de la educación, donde es el Mercado quién regula el acceso a la educación (de acuerdo las capacidades de consumo), lavándose las manos el Estado y quedando como un simple subsidiador de municipios y privados, contando estos últimos con un jugoso negocio a costa del esfuerzo de las familias chilenas.
Es por esto que entendemos que si buscamos un cambio verdadero a la educación, para que esta esté al servicio de la sociedad en su conjunto, NO BASTA con hacer reformas a las leyes que la sustentan, sino que debemos actuar por transformar las bases educacionales en sí mismas y a la base estructural que sostiene ésta y otras formas de dominación y explotación, es decir, el capitalismo. Entonces, no basta con una Reforma Educacional, o una Reforma Universitaria, sino que lo que necesitamos es una Revolución Educativa, que entregue la educación al conjunto de la sociedad y nos permita conquistarla como un verdadero derecho al servicio de nuestro desarrollo como seres humanos.
Es por esta razón que nos consideramos como sujetos revolucionarios y apostamos a que el pueblo vaya recuperando a través de su lucha y organización lo que el sistema le ha negado (salud, educación, vivienda, justicia, igualdad, libertad, etc.), generando instancias de autogobierno que le permitan tomar el control de sus vidas (lo que históricamente se ha conocido como Poder Popular), sólo así se puede alcanzar la emancipación del pueblo de Chile, y de toda América Latina. Este proceso se lleva adelante tanto a través de la lucha reivindicativa como a través de los distintos espacios organizativos y trabajos de construcción territorial que podamos ir desarrollando desde las bases, siempre con el énfasis en que aquello que hemos definido como derechos, los cuales se deben ejercer y defender por todos los medios existentes.
Convergencia Estudiantil ha surgido para ser un aporte real y concreto en la organización, lucha y construcción de un proyecto que nazca en el seno del estudiantado chileno. Un espacio abierto y democrático para todos los estudiantes, que deseen organizarse y trabajar para cambiar ésta educación, y a la vez construir una sociedad completamente distinta.
Sabemos que en las distintas universidades, institutos y centros de formación técnica existen un sin número de problemáticas y necesidades y, al mismo tiempo, existen una gran cantidad de estudiantes críticos, conscientes y con la firme convicción de querer construir una educación más justa y liberadora. A estos compañeros les dejamos abierta la invitación a acercarse, participar y construir conjuntamente un camino que nos permita recuperar una educación para todos y todas.
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